México, D.F.- Trabajar en una oficina tiene sus altas y sus bajas. Hay días aburridos y días divertidos. Los compañeros de trabajo son fenomenales u odiosos, pero siempre hay alguien que sobresale de todos ellos: el famoso Godín -antes conocido como Gutierritos-. A veces es muy fácil identificarlo, pero otras veces hay tantos candidatos que no se sabe con precisión quién es el Godín de Godínez.
SinDelantal.mx nos comparte este humorístico contenido editorial que incluye algunos tips para ayudarte a descubrir quién es el rey de los Godínez en tu oficina y si te ves reflejado en este personaje arquetípico.
Un Godín por excelencia detesta su trabajo pero no se atreve a dejarlo. Se queja y se queja, pero al final del día vuelve contento a sus labores. Sí, es un tanto contradictorio el pensamiento Godín pero eso en el fondo lo mantiene feliz.
Un Godín no conoce la luz del día, pues trabaja de foco a foco. Cuando cambiamos al horario de verano se «saca de onda» porque cuando sale de trabajar ve una luz intensa.
Los Godínez se mueven en manada. Van a comer a la fonda de la esquina en grupo. Cada día escogen una fondita diferente «para variarle», aunque saben que el menú es el mismo en todas. Disfrutan su comida sin verduras pero bien llenadora. Cuando el traje ya no les comienza a quedar cambian a las ensaladas, que regularmente dejan a los dos días porque «no saben a nada» y «son demasiado nutritivas»; sin embargo, es posible encontrar algunos Godínez con excelente figura y apariencia, así que ser uno de ellos no es sinónimo de gordura o fealdad, ni viceversa. Lo que sí es un hecho es que con buena, regular o mala apariencia, siempre traerán su gafete colgando.
Los Godínez disfrutan mucho el «viernes casual». No tienen que ponerse traje, por lo que optan por una vestimenta cómoda pero formal. Es común encontrarlos con sus pantalones caqui, su camisa blanca y zapato cómodo negro o café, acompañado de un suéter de grecas o liso color rosa, que combina con su outfit de viernes. Ese día se sienten libres.
El día clave para el Godín es la quincena. Van al cajero tres veces para revisar que ya hayan depositado y cuando ya cayó el depósito hacen planes para ir al bar en la noche con los cuates (al cual asistirán con el gafete colgando). Se queman la quincena en un santiamén y como no saben que ordenar comida a domicilio por internet no cuesta más e incluso se pueden encontrar unas súper ofertas, comienzan a llevar sopitas de microondas al trabajo porque ya no pueden ir a la fonda.
Los Godínez, a pesar de que utilizan la tecnología para trabajar, están en contra de usarla para su vida cotidiana (a excepción de Facebook, donde postean desde su trabajo o coche todo lo que hacen, ven y sienten). El Godín por excelencia no usará apps como la de SinDelantal.mx para hacer pedidos de comida en línea a domicilio; al contrario, necea con utilizar el teléfono aunque esto le cueste muchos intentos para poder comunicarse. Y cuando por fin lo logra ¡se le corta la llamada! Vuelve a intentarlo, logra hacer su pedido (a estas alturas ya muere de hambre) y cuando llega su orden, ésta está mal o incompleta.
Estas situaciones podrían ser evitables si se decidiera a utilizar la tecnología a su favor, pero sabemos que en el fondo el Godín es un poco masoquista.
Si te identificaste con alguna de estas características, no te preocupes: todos -absolutamente todos- alguna vez hemos sido, somos o seremos un Godín. Pero atención, que no te descubran sólo porque no sabes cómo usar una plataforma de pedidos de comida en línea.
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