Ciudad de México.- En México, la salud menstrual sigue siendo un tema rodeado de estigmas y poca atención en el entorno laboral a pesar de su impacto directo en la productividad y el bienestar de millones de mujeres.
Para abordar esta realidad, Dalia Empower, un movimiento enfocado en ayudar a cerrar la brecha de género a través del desarrollo personal y programas para el crecimiento de las empresas, y Plenna presentaron el informe “Menstruación y productividad laboral: el tabú que impacta el resultado del negocio”. Essity, empresa líder global en higiene y salud, se sumó a este esfuerzo con el objetivo de generar conciencia sobre este desafío y promover acciones que favorezcan un ambiente laboral más inclusivo.
¿Cuál es la situación de la salud menstrual dentro de las empresas?
A través de una serie de encuestas y análisis, realizadas entre octubre y noviembre de 2024, se recopiló la opinión de 2,214 mujeres de entre 18 y 55 años, así como de 75 empresas de distintos sectores y tamaños. Algunos de los resultados más reveladores que arrojó el estudio son:
El 81% de las mujeres siente que su productividad disminuye debido a las molestias menstruales.
Las molestias menstruales llevan al 45% de las mujeres a ausentarse de su trabajo por días u horas. Sin embargo, aquellas que laboran en espacios donde existen políticas sobre la menstruación faltan en promedio un turno laboral menos (de 8 horas) que aquellas en lugares donde este tema es completamente ignorado.
Solo el 5% de las empresas cuenta con políticas específicas para atender este tema.
Las mujeres que trabajan en empresas con políticas de apoyo a la salud menstrual reportan menos horas de ausentismo en comparación con aquellas donde no se considera el tema.
El 75% de las mujeres que han intentado tomar una licencia menstrual ha encontrado dificultades para hacerlo.
Los resultados reflejan que la brecha de género en las empresas impacta directamente la productividad laboral y, en consecuencia, la economía del país, considerando que en México las mujeres representan el 40% de la fuerza laboral, con 24,049,349 mujeres empleadas, y todas ellas tendrán en su vida cambios hormonales que son y serán parte de su día a día.
“Queremos que, con este estudio, también se ponga de relieve la importancia que tiene garantizar el acceso a productos de salud menstrual seguros y asequibles para todas las mujeres. De igual manera, consideramos que el estudio puede ayudar en los esfuerzos para normalizar, desestigmatizar la menstruación y ofrecer información, educación inclusiva y precisa sobre cómo gestionar la salud menstrual en las empresas”, mencionó Palmira Camargo, vp de comunicación corporativa CGA de Essity.
Implementar políticas laborales que consideren la salud menstrual fomenta la equidad de género
Además de visibilizar la importancia de la salud menstrual en el entorno laboral, este estudio resalta el papel clave que las empresas pueden desempeñar en la construcción de espacios más equitativos.
Implementar políticas que atiendan las necesidades específicas de las mujeres no solo contribuye a su bienestar, sino también fortalece la cultura organizacional, reduce las ausencias y mejora la productividad como lo hacen en Essity, donde fomentar un entorno laboral inclusivo es una prioridad.
“Según el informe, en Essity nos encontramos dentro del 11% que implementa políticas de equidad de género. Estas políticas incluyen horarios flexibles, trabajo desde casa, provisión gratuita de productos de gestión menstrual en los espacios de trabajo, educación y sensibilización sobre menopausia y una sala de descanso menstrual, entre otras iniciativas. Además, brindamos apoyo a nuestros colaboradores en distintas etapas de la maternidad, paternidad y salud menstrual, incluyendo a quienes atraviesan tratamientos de fertilidad, síntomas premenstruales o la menopausia, así como a quienes han dado a luz o adoptado. Nuestro objetivo es garantizar que todas las personas se sientan seguras, cómodas y respaldadas en su espacio de trabajo”, compartió Camargo.
Dalia Empower y Essity conminan a empresas y entidades públicas a reflexionar sobre los hallazgos de este informe y a considerar la implementación de medidas como licencias menstruales, horarios flexibles y acceso a productos de gestión menstrual en los espacios de trabajo. Iniciativas como esta contribuyen a la construcción de sociedades más inclusivas, igualitarias y prósperas.
Para conocer los resultados del informe puedes consultar este link.
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