Ciudad de México.- La traumatología es la rama médica encargada de tratar todas aquellas lesiones o patologías asociadas al sistema musculoesquelético. En las mejores clínicas especializadas se han adaptado a la vanguardia asistencial y ofrecen múltiples tratamientos de avanzada, en especial en lo que respecta a las operaciones de rodilla. Por consiguiente, si quieres conocer las últimas técnicas quirúrgicas, así como métodos tradicionales que han evolucionado significativamente, te animamos a valorar todas las opciones que te planteamos. ¡El bienestar físico no puede quedar condicionado por afecciones en esta articulación!
Las cirugías de rodilla evolucionan en las mejores clínicas de traumatología
Las clínicas especializadas en traumatología son las responsables de corregir muchas de las afecciones musculares y articulares que buena parte de la población padece a diario. En este sentido, una operación de rodilla resulta especialmente común, fruto del notable desgaste de dicha área del cuerpo. Sin embargo, al igual que en el resto de las áreas médicas, no todos los centros operan con la misma diligencia.
Con esto en mente, te animamos fervientemente a valorar a detalle cuáles son los mejores traumatólogos de tu ciudad. Allí te atenderán de forma personalizada para analizar tu caso en particular y encontrar la vía de atención adecuada, bien sea mediante el uso de tratamientos con células madre, células mesenquimales o, el tema de interés en esta ocasión, la cirugía. Sea como sea, acudiendo a los grandes especialistas del sector, tanto el procedimiento como los resultados serán incontestablemente positivos.
Operaciones de rodilla: ¿Cuáles son las tres cirugías principales?
Las operaciones de rodilla son procedimientos delicados que se deben realizar con una ejemplaridad incontestable sobre el marco médico. Hasta la fecha, encontramos tres tipos de cirugía que destacan por encima del resto: la prótesis de rodilla, la artroscopia y la osteotomía.
Veamos cuándo conviene proceder con cada una de estas intervenciones y qué retos o ventajas presentan para los pacientes. Recuerda que del buen hacer del traumatólogo va a depender tu integridad física, por lo que aspira siempre a la excelencia asistencial.
Prótesis de rodilla
La cirugía de prótesis de rodilla está orientada a todas aquellas personas que por dolor severo o por una deformidad en la rodilla no han encontrado el alivio en los antinflamatorios, las inyecciones de cortisona o la terapia física. Por suerte, el procedimiento se resuelve en tan solo 75 minutos y el alta puede darse transcurridas 24 horas.
Tras determinar que esta es la vía óptima, se ingresa al paciente para proceder con una evaluación detallada por parte del equipo de anestesia. El cirujano se encarga de remover tanto el cartílago como los huesos dañados para colocar los implantes más modernos del mercado. Una intervención sencilla que corta de raíz muchas de las molestias de esta articulación.
Artroscopia de rodilla
La artroscopia sirve tanto para diagnosticar como para tratar enfermedades internas de la articulación, ya que emplea un instrumento óptimo que ofrece imágenes claras en pro de la precisión. Un método poco invasivo que aborda un amplio volumen de patologías.
Las lesiones del ligamento cruzado y la meniscal, el desgaste del cartílago articular, los cuerpos libres de hueso, las inflamaciones en la membrana sinovial o las enfermedades reumáticas son algunas de las afecciones que encuentran su solución en este método. Un proceso que consiste en hacer pequeñas incisiones en aras de reducir el postoperatorio en la medida de lo posible.
Osteotomía de rodilla
Terminamos con la osteotomía, perfecto para los casos de artritis en una zona concreta de la rodilla. Esta intervención se suele complementar con otras operaciones como la cirugía de cartílago, optimizando así los resultados.
El proceso se basa en extirpar o añadir una cuña de hueso a la tibia o el fémur, lo cual supone un alivio considerable del peso corporal sobre la zona dañada de la rodilla. Ahora bien, tiene sus limitaciones y, pasados los 15 años, lo más habitual es necesitar un reemplazo total de rodilla para tratar la artritis con contundencia. Algo que, de nuevo, debe recaer en manos de un buen traumatólogo especializado.
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