Por Claudio Kandel
Director de DiSí Operaciones
Es de conocimiento general que producir utilidades es el principal objetivo de una empresa, pues todas quieren vender y ganar. Como en todo, concentrarse en una sola meta ocasiona que se pierdan de vista otros aspectos que pueden ser muy útiles como el margen de ganancia.
A veces resulta confuso entender qué son las utilidades y diferenciarlas del margen de ganancia. Entonces, definamos qué es el margen de ganancia para evitar confusiones y tomar las mejores decisiones para la empresa. El margen de ganancia se expresa como porcentaje e indica cuán rentable es un negocio. A mayor porcentaje, mayor rentabilidad.
Por lo general, los empresarios asumen que, para incrementar las utilidades, es necesario aumentar los ingresos por medio de las ventas. A pesar de ser un buen punto de partida, el problema es que el incremento en los ingresos no necesariamente hace más rentable a una empresa.
¿Cómo se calcula el margen de ganancia?
La diferencia entre el margen de ganancia y las utilidades se analiza con el siguiente ejemplo: si la empresa vende 500 mil pesos y sus gastos ascienden a 400 mil, con una resta podemos concluir que la utilidad fue de 100 mil pesos.
Para calcular el porcentaje de margen de ganancia, la operación a realizar es una división de la utilidad neta (100 mil pesos) entre los ingresos totales (500 mil pesos) y multiplicarlo por 100, para obtener un total de 20%.
El margen de ganancia es mucho más importante que solo conocer el porcentaje: aunque se registren más ventas, puede ser que el margen de ganancia disminuya porque el incremento en ventas también implica un aumento en los gastos.
Continuando con el ejemplo anterior, digamos que las ventas aumentan a 700 mil pesos, pero los gastos suman 600 mil pesos; por lo tanto, la utilidad sigue siendo 100 mil pesos pero el margen de ganancia disminuye a 14.3%. Esto significa que, pese a tener más ventas, la empresa es menos rentable.
Lo recomendable para la empresa de este ejemplo sí es incrementar las ventas, pero también implementar una estrategia de disminución de costos y gastos para sostener e incrementar su rentabilidad.
Con este ejemplo se demuestra la importancia de que los líderes de las empresas estén conscientes de que no siempre aumentar las ventas es lo más conveniente. Ser estratégicos en las decisiones y utilizar las herramientas correctas, como calcular el margen de ganancia, hará que la organización alinee su operación para ser cada vez más rentable.
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