social selling en comercio digital

Por Marcos Pueyrredon
Presidente del eCommerce Institute y cofounder & global executive SVP de VTEX

En la última década, hemos visto cómo la evolución digital está impactando tanto en las compras como en las ventas online. En este contexto, el social selling y la inteligencia artificial se presentan como dos conceptos que hoy lideran las tendencias en marketing y comercio y moldean el futuro de las interacciones entre marcas y consumidores.

Social Selling: Vender de manera natural con el apoyo de influencers

El social selling es mucho más que vender a través de redes sociales; es construir relaciones auténticas y relevantes con los consumidores en un entorno donde ellos ya interactúan, buscan y comparten. Esto representa un aumento en las tasas de conversión y en la fidelidad de los clientes de las marcas que implementan esta estrategia correctamente.

Podemos notar cómo Instagram y TikTok se han convertido en vitrinas de productos. Más allá de los anuncios tradicionales, las marcas están apostando por influencers y micro influencers que promueven productos con un tono natural y cercano, generando confianza en sus audiencias. Para ello, es clave crear contenido auténtico porque los consumidores de hoy quieren más historias reales y menos campañas publicitarias rígidas.

Pero no podemos hablar de social selling sin mencionar el fenómeno del ‘live shopping’, tendencia que comenzó en Asia y ahora conquista América Latina, la cual combina el entretenimiento en tiempo real con la venta directa. Algunas empresas, de hecho, están innovando con presentadores virtuales que ofrecen una experiencia personalizada y atractiva, guiando a los usuarios en sus decisiones de compra, mejorando la experiencia del cliente y reforzando la conexión emocional con la marca.

Inteligencia Artificial: El verdadero motor del comercio personalizado

La inteligencia artificial dejó de ser una tecnología futurista para convertirse en el núcleo de muchas estrategias comerciales actuales. Su principal ventaja es su capacidad de procesar y analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real, lo que permite a las empresas anticiparse a las necesidades de los consumidores y ofrecerles experiencias personalizadas.

Por ejemplo, los chatbots impulsados por IA hacen mucho más que responder preguntas frecuentes, también pueden actuar como asesores de compra, recomendando productos basados en el historial de búsqueda y compra del usuario. Plataformas como VTEX ya integran esta tecnología para optimizar la experiencia del cliente y aumentar las tasas de conversión.

Además, la IA está transformando áreas críticas como la gestión de inventarios con algoritmos predictivos que posibilitan que las empresas pueden anticipar demandas estacionales, evitando tanto el desabastecimiento como el exceso de inventario. Esto se traduce en una operación más eficiente y en una mejor experiencia para el cliente, que siempre encuentra lo que busca.

Sin embargo, uno de los grandes desafíos de la inteligencia artificial es garantizar que los datos utilizados sean éticos y respeten la privacidad del consumidor, razón por la que es recomendable que las empresas sean transparentes a la hora de recopilar y utilizar esta información, y se eviten sesgos algorítmicos que puedan generar experiencias desiguales.

También hay que considerar que en la era del Unified Commerce, donde el cliente interactúa con la marca en múltiples canales, la IA es el puente que une estas experiencias. Su capacidad para integrar datos de todas las interacciones del cliente -ya sea en línea, en tienda o a través de redes sociales- permite a las empresas ofrecer una experiencia fluida y coherente.

Si un cliente abandona un carrito de compras en línea, gracias a la IA, el sistema puede enviar un recordatorio personalizado a través de WhatsApp y ofrecerle un descuento exclusivo. Y si el cliente visita la tienda física, el vendedor puede tener acceso a esta información para cerrar la venta. Este nivel de personalización y consistencia es lo que distingue a las marcas líderes en el mercado.

De hecho, las marcas y retailers de este ecosistema digital ya tienen que dominar el concepto de ‘Crew de Engine de AI’, que son estos nuevos eslabones que se suman a la cadena comercial, porque no solo tenemos que hablar de la construcción del mensaje personalizado, sino del entrenamiento de roles específicos que en un tiempo empezarán a interactuar entre sí.

Empresas deben apostar por la integración de nuevas tecnologías en su comercio digital

Me gusta decir que cuando hablamos de adoptar social selling o inteligencia artificial -o ambas- no solo hablamos de tecnología, sino de un cambio cultural dentro de las empresas. La resistencia al cambio es uno de los mayores obstáculos, especialmente en organizaciones con estructuras tradicionales.

Por eso, implementar estas estrategias requiere inversión en formación, infraestructura y, sobre todo, un compromiso con la innovación continua, pues el social selling y la inteligencia artificial no son tendencias pasajeras, sino pilares fundamentales del comercio moderno.

Como líderes de la industria, en VTEX nuestra responsabilidad es tomar estas tecnologías de manera ética y estratégica, siempre poniendo al cliente en el centro de nuestras decisiones y comprendiendo que solo así el futuro del comercio digital está lleno de posibilidades.

Foto: Diseñado por Freepik

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