Ciudad de México.- ¿Cuántas apps tienes descargadas en tu móvil que llevas semanas o meses sin usar? El desarrollo de aplicaciones móviles es un trabajo arduo que conlleva una considerable inversión de tiempo y capital, pero de poco servirá desarrollar una app que los usuarios descargan para dejar olvidada en pocos días, un simple ícono ocupando pixeles en las pantallas de sus dispositivos.
La tasa de retención de usuarios mide, justamente, el porcentaje de usuarios que continúan utilizando una aplicación en un lapso de tiempo determinado y suele expresarse en porcentajes. En 2020, por ejemplo, GbWhatsApp mantuvo en Estados Unidos una tasa de retención mensual del 91%.
Mientras mayor sea la tasa de retención, mejor: entre otras tantas razones, es más económico mantener usuarios existentes que adquirir nuevos constantemente.
Estas son algunas maneras de mejorar la tasa de retención de una aplicación móvil:
Valor continuo y actualizaciones frecuentes
La mejor manera de aumentar la tasa de retención de una app es ofrecer una solución definitiva a un problema o una necesidad, manteniendo siempre un esquema de mejora continua.
¿Cómo? A través de actualizaciones frecuentes que apunten no solo a solucionar bugs (errores) o a mejorar el rendimiento de la app, sino a ampliar continuamente el valor ofrecido a los usuarios con nuevas funcionalidades.
Mejora continua de UI y UX
La experiencia de uso (UX) y la interfaz de usuario (UI) de la aplicación son dos pilares sobre los que se sostienen la usabilidad y, en última instancia, la tasa de retención de una app. Esto porque la app más útil del mundo quedará igualmente olvidada si a los usuarios les resulta incómodo o frustrante utilizarla.
Asegúrate de afinar constantemente la UI de la aplicación para mejorar la UX, priorizando mejoras en el diseño y el flujo de uso a partir de la recolección de información y la retroalimentación por parte de los usuarios.
Personalización de la experiencia
Un paso más en el camino a una UX superadora es ofrecer a los usuarios la posibilidad de personalizar su experiencia, definiendo, por ejemplo, aspectos visuales y de uso de la app, como el color de fondo o la jerarquía de las categorías, y configurando la frecuencia y el tipo de las notificaciones.
Piensa en WhatsApp Plus, que te permite modificar aspectos de la interfaz y de la funcionalidad, silenciando o archivando conversaciones, definiendo tus niveles de privacidad, y mucho más.
Incluso es factible, y útil personalizar la UX desde el lado del desarrollador, insertando el nombre del usuario en las notificaciones, por ejemplo, o incluyendo servicios localizados según su ubicación geográfica, por nombrar algunas posibilidades.
Notificaciones no invasivas
Las notificaciones son parte integral de la usabilidad de una aplicación, pero mal configuradas pueden ser una auténtica molestia para los usuarios.
Asegúrate de que las notificaciones de la app, en especial las notificaciones push, no sean invasivas, habilitando únicamente las necesarias, las que aporten algún tipo de valor o utilidad a los usuarios.
Una última recomendación para aumentar la tasa de retención de cualquier aplicación móvil es «premiar» a los usuarios fieles, no necesariamente con objetos materiales, sino, por ejemplo, con indicadores de estatus, diferenciando a los más asiduos de los más nuevos.
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