Ciudad de México.- La época de vacaciones es donde la familia pasa más tiempo junta y los padres pueden estar más pendientes de la frecuencia con que sus hijos miran videos, escuchan música o leen libros en inglés; asimismo, los viajes al extranjero son una forma de conocer qué tal se desenvuelven con el idioma.
En definitiva, los padres mexicanos han visto de primera mano el nivel de inglés que tienen sus vástagos y su percepción no es muy optimista, ya que para el 60 por ciento sus hijos no tienen un buen nivel de inglés, según refleja un estudio reciente realizado por Kids&Us a más de 3 mil 400 padres de cuatro mercados internacionales, de los cuales 850 son de México.
Una variable a destacar es que los padres mexicanos son exigentes. Así lo demuestra su grado de satisfacción con el nivel de inglés de sus hijos, ya que sólo un 10 por ciento de los encuestados está totalmente satisfecho y un 31 por ciento considera que deben mejorar.
Ante esta situación cabe preguntarse cuáles son los motivos que impiden a los jóvenes alcanzar un nivel superior. El 39 por ciento de los papás apunta a la falta de tiempo como el primer impedimento que tienen sus hijos para dedicar más horas al estudio del inglés. Eso sí, el 94 por ciento considera prioritario que sus hijos estudien inglés.
Las razones por las que los padres quieren que sus hijos tengan un buen nivel son diversas, pero en primer término destaca la mejora de su futuro laboral (66%). Muy por debajo le sigue el enriquecimiento cultural (12.6%).
Pese a estos datos, los padres mexicanos tienen esperanza en el futuro, ya que el 91 por ciento está convencido de que sus hijos tarde o temprano alcanzarán un buen dominio del inglés. Estas cifras son parejas a la comparativa entre el nivel de inglés de padres e hijos, ya que el 70 por ciento de los adultos tiene claro que los jóvenes los superarán en el dominio del idioma.
Kids&Us es un centro de enseñanza de inglés para niños entre 1 y 18 años que cuenta con un método propio basado en el proceso natural de adquisición de la lengua materna. Este método fue creado por la filóloga Natàlia Perarnau, fundadora de la empresa con sede en Manresa, en Barcelona, España, y busca reproducir el sistema con el cual los niños adquieren su propio idioma.
Actualmente, la academia cuenta con más de 90 mil niños aprendiendo inglés bajo este método. A México llegó en 2014 con dos centros, a los que se suman la apertura de cuatro centros más para el periodo escolar 2016-2017. Entre sus planes se encuentra expandirse por el continente americano a través del modelo de franquicias, que se sumarán a los 322 centros que operan en países como España, Andorra, Francia, Italia, Bélgica, Portugal, República Checa y Marruecos.
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