Ciudad de México.- Si estás pensando en invertir y no tienes experiencia en ello o, por el contrario, quieres afianzar tus conocimientos sobre el mercado financiero, debes considerar que tener en cuenta cómo manejar el riesgo es una de las principales tareas a las que debes darle prioridad.
Gestionar el riesgo como inversor requiere del estudio minucioso del mercado y de mucha dedicación, además de la utilización correcta de las herramientas que facilitarán esta tarea. Si bien puede tornarse una actividad un poco engorrosa, no es imposible saber identificar cuáles son los riesgos y cómo evitarlos.
¿Por qué es importante saber gestionar el riesgo en inversiones?
Es sabido que al hacer cualquier tipo de inversión, como operador estás asumiendo el riesgo que eso conlleva y, aunque últimamente son cada vez más las personas que deciden hacer inversiones de alto riesgo, la estrategia no es para nada sencilla.
La importancia de saber gestionar el margen de error radica en el hecho de que podrás darle seguridad a tu inversión y, en caso de pérdidas, tu capital no se verá comprometido. En un mercado tan volátil, como lo es el bursátil, hacerse de una buena estrategia es la diferencia entre el éxito y la pérdida de tu operación.
Aunque el riesgo no se disipa por completo, el margen se reduce considerablemente si sabes analizar el mercado. Para esto debes considerar, asimismo, el tipo de activo en el que inviertes.
¿Cómo manejar el riesgo como inversor?
Para armar una estrategia exitosa de inversiones debes tomar en cuenta una serie de elementos que te permitirán estudiar de mejor forma tu operación y el mercado en que se regula.
Lo primero que debes preguntarte es qué tipo de inversor eres. Al identificar la magnitud de la inversión que deseas hacer puedes crear un equipo de trabajo profesional que te ayudará a crear una gestión satisfactoria.
Recuerda que los inversionistas conservadores le dan mayor importancia al riesgo, por lo que sus operaciones suelen realizarse en rentas fijas. Los moderados procuran mantener la mayor parte de su capital invertido en estos mismos instrumentos y, a pesar de que pueden tolerar el riesgo, prefieren mantener un límite un poco más flexible para sus operaciones.
Por otro lado, los inversionistas agresivos procuran mayor rentabilidad a sus operaciones asumiendo estrategias más arriesgadas. Comúnmente son personas jóvenes y de pocas responsabilidades que cuentan con una fuente de ingreso constante.
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